Consejos para diseñar oficinas con ergonomía adecuada
Las oficinas, como todos los espacios interiores, deben estar diseñados de manera que interactuemos con ellos confortablemente. A la hora de diseñar una oficina, hay que tener muchos factores ergonómicos en cuenta.
La ergonomía. Es la disciplina que nos permite diseñar un espacio de manera confortable y evitando problemas de salud.
Mobiliario:
Elegir el mobiliario adecuado, más allá del diseño, es fundamental para un puesto de trabajo. Trabajar incomodos no nos permite general buenos resultados en nuestra labor.
Los escritorios y asientos, tienen que interactuar de manera que se mantengan las posturas adecuadas: cabeza levantada y mentón paralelo al suelo, columna erguida apoyada en el respaldo, pies apoyados con tobillos en ángulo recto, rodillas en ángulo recto más elevadas que la pelvis, antebrazos deben colocarse paralelos al suelo, con muñecas y palmas de las manos en posición horizontal.
Para evitar la fatiga ocular y dolores en la nuca, lo ideal es que lo alto del monitor se encuentre por debajo o justo al mismo nivel que los ojos, y la distancia de la pantalla entre 50 a 70 cm. Colocar un sector de descanso con sillones o sofá, permite tomarnos un tiempo para relajarnos.
Iluminación:
En relación a las fuentes de iluminación (ventanas, lámparas, tubos). Se trata de evitar los reflejos en la pantalla, con lo que se aumenta la visibilidad y disminuye la fatiga ocular.
1.- La luz natural es conveniente, pero no es aconsejable que el sol dé directamente en el monitor. Es apropiado que estas cuenten con persianas o cortinas graduables.
El color:
El color es un factor que influye sobre nuestras emociones, teniendo efectos estimulante o relajante.
En oficina se aconsejan colores claros sobre las paredes, blanco, marfil, arena, grises, beige, entre otros.
1.- Un equilibrio adecuado de colores, materiales y texturas puede proporcionar el tipo de estímulo sensorial que necesitamos para ser creativos y productivos en el trabajo.
2.- Los matices de colores y los diferentes grados de transparencia y de luminosidad pueden ayudar a crear este entorno diversificado.
Los tonos azules, verdes y violetas dan un sentimiento de paz y ayudan a la concentración y relajación.
Se deben evitar los tonos demasiado cálidos como el rojo o el naranja ya que éstos pueden provocar estrés. El morado estimula la imaginación y el amarillo provoca entusiasmo.
Consejos para diseñar oficinas con ergonomía adecuada
Consejos para diseñar oficinas
Autor: Corina Malén Freijo